Cada día se solicitan menos préstamos sin nómina por desconocimiento

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Los créditos sin nómina son conocidos por la posibilidad de obtener dinero en efectivo aunque no cuentes con una nómina que te avale. Estos sufrieron un descenso en el 2016, según los datos publicados esta semana por el Banco Central, ya que este tipo de préstamo, aproximadamente estamos hablando de unos 120,6 mil millones en comparación con los 132,6 millones registrados en 2015.

¿Es el fin de los préstamos sin nómina?

Sin embargo, este tipo de alternativa ya no es tan atractiva para muchos, aunque hay que tener en cuenta que este tipo de préstamos sin nómina sigue ofreciendo tasas de interés de mercado más barato.

Según el director ejecutivo de la Asociación Nacional de Ejecutivos de Finanzas, Administración y Contabilidad (Anefac), Miguel José Ribeiro de Oliveira, la reducción de la nómina de endeudamiento del año pasado se debió a la recesión que atraviesan varios países, ya que hay muchas empresas en estos países que al estar en crisis, han dejado de pagar salarios.

Oliveira señala que la tasa de promedio mensual de la nómina es su mayor activo, pero no quiere decir que no exista ningún riesgo en la contratación de este tipo de crédito. Según él, el interés de estos préstamos sin tener nómina se situó en el 2,3% en promedio al mes del año pasado. La financiación para el individuo convencional, presenta las tasas de pedidos en un 5% y el interés en las tarjetas de crédito renovable alcanzó el 48,6% todo un récord.

La burocracia es lenta y encima hace mucho la vista gorda, así que muchos pueden pedir prestado sin pensar en las consecuencias, ya que este tipo de riesgo existe incluso con la limitación del 30% en el uso de la cantidad prevista en la nómina. Por esta razón, no se recomienda este tipo de créditos sin nómina para jubilados, que ya cuentan con una renta pequeña y puede comprometer seriamente el presupuesto con el préstamo.

Los créditos sin nómina son prácticos según qué prestamista

créditos sin tener nóminaUn pensionista de 71 años está siendo todo un ejemplo por haber optado por adquirir un préstamo sin nómina para así poder ayudar a pagar la universidad de una de sus hijas.

El protocolo que este jubilado inicio para pedir uno de estos préstamos parecía correcto, aunque después afirmó ser una víctima de fraude, ya que este recibió el dinero pedido en su cuenta y al principio todo bien, pero según cuenta la empresa que realizó el préstamo, este jubilado o su hija volvieron a realizar una refinanciación de su crédito, aumentando así su deuda, cosa que el jubilado niega.

En estos casos, la falta de conocimiento es uno de los problemas

Con la debida orientación a la hora de saber las características de los créditos sin  nómina, el tanto por ciento de interés que nos van a cobrar y en cuantas cuotas, sería más que suficiente para que la gente no volviera a tener este tipo de problemas, ya que esto y como todo, tiene su lado positivo y negativo. Por lo tanto, está en tu mano no caer en fraudes ni engaños.

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